En la noche del sábado se suscitó un conflicto con el espacio La Barra, del Club Atlético Villegas, por el evento realizado con motivo del Día del amigo.
Según manifestó el intendente Gilberto Alegre, el sábado a la noche se puso de manifiesto un conflicto que “se había originado unos días antes respecto al funcionamiento del local La Barra, comercio que funciona en las instalaciones del Club Atlético Villegas” quienes habían solicitado una autorización para realizar un evento.
“Teóricamente era para organizar un evento, y el secretario de Seguridad lo autorizó porque no había ningún impedimento para que eso ocurriera. Posteriormente empiezan a aparecer una serie de publicaciones donde aparece que ya no era un evento normal para festejar el Día del Amigo, sino que ya se transformaba en un boliche bailable”, afirmó.
Alegre hizo hincapié en que “utilizaron a los chicos de los colegios para salir a vender entradas y estimulaban el consumo de cerveza con premios por tomar hasta determinada cantidad” y agregó que “es claro que no van solamente adultos, sino que se llena de adolescentes.”
Según el intendente municipal, esto va “en contra de lo que se pretende, que es cuidar a los adolescentes en la noche y lo más grave, es que lo lleva adelante una institución que es Atlético” y que Eduardo Irasola, dirigente del club “defiende fervientemente argumentando que lo había autorizado el secretario de Seguridad, y es cierto, pero no para que funcionara como un boliche bailable”.
Expresó además que “cuando se les dijo que no, empezaron a desatarse una serie de conflictos, de discusiones y de reuniones que no llegaron a buen puerto. Tal es así que Atlético, desobedeciendo absolutamente todas las disposiciones legales, hicieron el evento.”
“La Municipalidad, junto con la Policía, actuaron con toda cautela para no generar ningún inconveniente mayor, ni conflicto, pero se apersonaron esa noche al lugar” y encontraron que (entre otras cosas) estaba lleno de menores y excedida ampliamente en la cantidad de gente que se autoriza mediante lo habilitado por bomberos, por lo que “se cometieron toda clase de infracciones y se labraron actas, algunas de competencia del Juzgado de Paz, otras de competencia de la Justicia de Falta Municipal y aunque la Policía trató de hacer entender que lo que estaban haciendo no era correcto continuaron adelante con todo y se procedió a la clausura de La Barra”, sostuvo.
Gilberto Alegre recordó también que cuando se reinauguró la sede social “defendí la vida de los clubes, porque es donde se protege a los jóvenes y cuando hay algún problema son los mayores los que controlan a los chicos” y enfatizó “esa es la vida social que creemos se tiene que defender, pero cuando Atlético pretende hacer un boliche bailable, entra en otra categoría, que es el negocio de los boliches bailables, que lleva a los menores a incentivar el consumo”.
“Es muy raro entender que defienden a los chicos incentivando el consumo de cerveza, antes en el deporte se premiaba a los chicos por las actividades deportivas que hacían, ahora los chicos se los premia por la cantidad de cerveza que toman. Me parece que lamentablemente Atlético está incurriendo en un error muy grande y debería rever seriamente estas situaciones porque no es el rol que tiene que tener el club”.
Alegre indicó, por otra parte, “para funcionar como boliche bailable tienen que estar inscriptos en el Registro de Actividades Nocturnas (RAN), algo que no tienen.” El RAN es un requisito del Registro Provincial de Comercialización de Bebidas Alcohólicas (REBA) provincial en el que los comerciantes comprendidos en el Art. 1° de la Ley N°14.050 (locales bailables, confiterías bailables, discotecas, discos, salas y salones de baile, clubes y demás locales donde se realicen actividades bailables y/o similares),
“Es muy lamentable que una institución pretenda vulnerar todas las leyes y además lo haga para defender la venta de bebidas alcohólicas a menores y sin tener en cuenta la capacidad de personas permitidas en el espacio. Fuimos inflexibles en hacer cumplir las disposiciones vigentes” para evitar que suceda una tragedia.
Por último, Gilberto Alegre felicitó al secretario de Seguridad, Luis Plana “por haber entendido a tiempo que lo que se pretendía hacer era algo que no correspondía” y a la inspectora que se presentó el sábado en el lugar y “constató todas las infracciones que se habían cometido. Lamento profundamente plantear estos conflictos, no deberían ocurrir en una comunidad como la nuestra”.
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