Con profunda fe y recogimiento, la comunidad católica de General Villegas celebró el 139° aniversario del nacimiento del Beato Ceferino Namuncurá, en el marco de los 14 años de la inauguración de la ermita ubicada en la intersección de Pichincha y Chassaing Sur, espacio que rinde homenaje al primer argentino de origen mapuche reconocido por la Iglesia Católica.
El encuentro tuvo lugar el martes 26 de agosto a las 14.30 horas, con una misa oficiada por los sacerdotes Matías Micucci y Tomasz Wargocki, que reunió a vecinos y fieles de la ciudad. Acompañaron la ceremonia los funcionarios municipales Mariano Maranta, Luis Plana, Jonathan Barroso, Nicole Cestassi y Mauricio Olivera.
La ermita de Ceferino Namuncurá, construida durante una gestión anterior del intendente Gilberto Alegre, se ha consolidado como un lugar de encuentro espiritual y de devoción para la comunidad.
Ceferino Namuncurá, joven mapuche argentino, es recordado por su profunda fe católica y su ejemplo de vida, que a pesar de verse truncada por la enfermedad y su muerte prematura, trascendió en el tiempo y se convirtió en un símbolo de unión entre culturas y religiones.
El camino hacia su reconocimiento en la Iglesia se inició en 1944 con el proceso de beatificación; en 1972 fue declarado venerable y, finalmente, el 11 de noviembre de 2007, el Papa Benedicto XVI lo proclamó Beato, siendo el primer indígena argentino en recibir este título.
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